Casi una semana ha pasado desde que llegamos del Campamento.
Las horas de sueño ya se han recuperado, las quemaduras se van yendo, las
pequeñas heridas y ampollas van cicatrizando, el montón de ropa sucia que
trajimos ya ha desaparecido… pero el buen sabor de boca del Campamento sigue en
el paladar, muestra de que este Campamento ha sido muy especial.
Y llegados a este momento, no se nos viene a la cabeza otra
palabra que GRACIAS.
GRACIAS a los padres de los acampados, por confiar en
nuestro grupo de monitores a su mejor tesoro (y alguna familia nos confiaba ¡hasta
tres tesoros!). Por tener paciencia en los momentos difíciles los primeros días
de lluvia, por seguirnos y comentar en nuestro blog, por dejar a los niños en
el Campamento tras el día de las familias aunque algún papá o alguna mamá se
fue con lágrimas el camino de vuelta… GRACIAS también por confiar en nosotros
en los momentos difíciles los padres de acampados accidentados (aprovechamos
para mandar un fuerte abrazo a Andrea y esperamos que el brazo vaya “soldando”
bien y la escayola no te impida disfrutar de la piscina este verano).
GRACIAS a los acampados por darlo TODO este campamento:
construirlo desde cero como toca cada año, reforzarlo al máximo para aguantar
las lluvias de los primeros días, adornar cada recinto, competir en todos los
juegos, compartir con los compañeros, ayudar a los miembros de la rama o
incluso a los de ramas más jóvenes, y por todas las sonrisas de buenos días que
ayudaban a los monitores a paliar las horas de sueño de menos que llevaban.
GRACIAS a los amigos del Campamento que no pudieron aguantar
todos los días viendo el blog y se personaron en el Campamento. Y, una vez
allí, en vez de disfrutarlo desde la barrera, se “arremangaron” y se pusieron a
echarnos una mano. GRACIAS Antonio, Chema, Inma, Marta, Marina, Jaime, Javi,
Diana, Pedro.
GRACIAS al grupo de monitores que dedicaron parte de sus
vacaciones, de manera gratuita, a colaborar en que el Campamento fuese una
realidad.
GRACIAS a nuestro P. Jaime por sus consejos, sus
eucaristías, sus anécdotas y su disponibilidad.
GRACIAS a nuestro enfermero Joaquín, por su saber estar
cuando tenía poco que hacer, y cuando los últimos días se agolpó todo, siempre
con su mejor sonrisa, su profesionalidad y su disponibilidad.
GRACIAS a nuestros Sherpas, Antonio y Luis, por hacer
realidad nuestras marchas, alguna improvisada debido a las lluvias, y hasta la “Cinco
Lagunas” de Pioneros que llevaba años sin realizarse en nuestro Campamento.
GRACIAS a los monitores Lobatos (Víctor-Akela, Ana-Raksha, Alberto-Bagheera,
Sergio-Hathi, Emilio-Baloo, Alba-Darzee, Marina-Kotick, Carmen-Kaa) por su paciencia
y su dulzura con los pequeños del Campamento, dando una plena dedicación para
que ellos sólo tuviesen que disfrutar.
GRACIAS a los
monitores Rangers (Carlos, Nacho, Nuria, Pepe, Emilio, Antonio) por haber
sacado el 110% de los chicos de su rama, con unas construcciones inigualables,
un gran ambiente, e incluso darle música a nuestro Campamento.
GRACIAS a los monitores Pioneros (María José, Paco, Javi)
por sacar lo mejor de nuestros “mayores”, haciendo brotar su solidaridad con
los pequeños, su unión y sus ganas de superarse.
GRACIAS a nuestro intendente, Santos, por su interés por
tener el blog actualizado para padres preocupados y que no faltase nada a monitores
y acampados, incluso aportando alguna idea nueva “digital” con las que él
disfruta.
Y, especialmente, GRACIAS, a nuestro director del
Campamento, Isaac, por no dirigir desde una silla, sino por implicarse en cada
una de las actividades del Campamento, desde poner puentes, limpiar la fosa, probar
alguna marcha nueva o tener que lidiar con la burocracia de las administraciones.
Un fuerte abrazo y hasta el Campamento San José ’17.
